Es verdaderamente preocupante que seguidores del vicepresidente Julio Cobos estén empezando a desarrollar una acción desgastante del Presidente de la UCR. Esto es estratégico, lo está haciendo así un sector que reconoce que apoya decididamente al Vicepresidente Cobos y sostienen que Morales es el que pretende “esmerilar a Cobos”.
En principio, veo realmente peligrosa que esta posición venga de seguidores de un hombre como Cobos, quien apoyó y fue electo Vicepresidente, por el proyecto de los Kirchner del cual ahora está distanciado y es claro opositor.
Es bueno aclarar que los radicales recibimos con entusiasmo y los brazos abiertos a quienes luego de cometer el error de compartir un espacio con quien a la postre implementó un modelo autoritario, concentrador, poco republicano. Que dividió al país en numerosas partes, que perjudicó al conjunto de Provincias y que copta voluntades, borocotizando y por lo tanto desprestigiando la política, recapaciten y manifiesten su intención de retornar a la UCR.
Nos parece bien que regresen, pero no que pretendan erosionar a la institución de la UCR ni criticar y desgastar a sus autoridades, las que con aciertos y errores mantuvieron vivo un partido que otros abandonaban o que negociaban con el Kirchnerismo mientras se decían radicales.
Como viejo radical, parte de los que nos tocó ponernos la mochila del fracaso de la Alianza y cruzar el desierto mientras que otros se fueron del partido, valoro -y mucho- a las autoridades que lograron mantenerlo aún en condiciones muy adversas, de modo tal que hoy está instalado nuevamente, pese a que tuvimos que sufrir la dispersión de algunos tentados por del poder.
Vemos como llamativa esta extraña actitud de quienes, por un lado quieren dirigir los destinos de la UCR, y pretenden ser apoyados por toda la UCR en una postura personalista a favor de Cobos, pero todavía no se deciden si se mantienen con el partido CONSENSO FEDERAL, Partido al cual pertenece Julio Cobos – el CONFE- o si lo disuelven y se incorporan en la vieja y centenaria Unión Cívica Radical. Es como que algunos quieren estar con un pie en cada lado.
Una de las criticas que se le hace a Morales es que pretende que a la UCR la conduzca alguno de los dirigentes que permanecieron militando y jugándose por ella en sus peores momentos, ¿es acaso mucho pretender?, deberán considerar que los miles y miles de radicales que permanecieron militando activamente en el Partido tienen derecho porque se jugaron y lo mantuvieron vivo.
La política de los seguidores de encuestas es también peligrosa. Faltan 23 meses para las elecciones, hoy en día es cierto que Julio Cobos está bien instalado en las encuestas, pero recordemos que 20 meses antes de las elecciones del 28 de junio, las dos personas mejores instaladas eran Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner y así están hoy rechazados por mas de las dos terceras partes de la sociedad. Con ese criterio si mañana es Reuteman o Sola o Macri quien mida bien, ¿tendremos que encolumnarnos detrás de ellos?
Gracias a Dios, a diferencia de lo que piensan los personalistas de siempre, las ideologías no murieron, El radicalismo supero la muerte de sus lideres, no por acomodaticio u oportunista, sino porque a lo, largo de su historia, privilegió hacer lo que se debía hacer y no lo que circunstancialmente le convenía.
Es necesario tener vocación de poder y construir una fuerza política grande, pero no a cualquier costo, no todo vale en política, aliarse con cualquiera aun cuando existan diferencias ideológicas solo conduce al fracaso y al desgaste de la democracia y de los partidos políticos. La existencia de más de 700 partidos en la Argentina habla claro del fracaso de los personalismos y de los oportunistas, hoy existen partidos que si sus líderes se retiran, se jubilan o se mueren, desaparecen en corto tiempo.
“No sigan a hombres, sigan ideas, los hombres fallan, se equivocan o no pueden las ideas perduran en el tiempo”, esa frase del discurso de don RAUL ALFONSIN, marcó mi vida allá por el 83 y se la repito a los jóvenes cuantas veces puedo para que no se dejen tentar por los oportunismos ni los personalismos y para que no abandonen sus ideales radicales.
Personalmente entiendo que la aspiración de ganar las elecciones próximas, sólo se logrará en el escenario del Acuerdo Cívico y Social y dentro de los partidos que lo conformar están el Consenso Federal de Julio Cobos quienes tienen todo el derecho de proponerlo, está también el Partido Socialista que tienen todo el derecho de proponer a Hermes Binner, la Coalición Cívica que tienen todo el derecho de proponer a Elisa Carrió y también está fundamentalmente la UCR que tienen todo el derecho a proponer un candidato de los importantes dirigentes que tiene, o de apoyar alguna de las propuestas ofrecidas por los otros partidos integrantes del Acuerdo. Por lo que considero que será determinante en un tiempo breve resolver cual será el mecanismo de elección de los candidatos en el marco del Acuerdo Cívico y Social, para que luego todos juntos salgamos a trabajar a favor de quienes hayan sido democráticamente electos.
Para quienes impulsan la candidatura de Cobos, seria importante que pretendan ganarse el respaldo de los radicales que conservaron el partido y esto con seguridad que intentando desgastar a las autoridades de la UCR no lo van a conseguir.
No es demasiada exigencia de los radicales que conservamos el Partido, -cuando otros se fueron en la búsqueda de posiciones mas cómodas al amparo del poder- aspirar que sea un radical perseverante quien conduzca los destino de la UCR para acompañar al futuro Presidente de la Nación y saber aconsejarlo evitando así que en el futuro se repitan equivocaciones cometidas en el pasado reciente.
Como presidente del Comité Provincia de la Provincia de Jujuy me permito sugerirle al Sr. Vicepresidente de la Nación, Julio Cobos, que contenga la apasionada obsecuencia de algunos de sus seguidores que agrediendo a las autoridades de nuestro Partido Centenario, lejos de logar la voluntad de apoyo de los afiliados que se encuentran distribuidos por toda la geografía argentina, -lugares donde no llegan ni la radio, ni la televisión, ni los diarios escritos ni los digitales como Impulso Baires-, puedan ganarse el rechazo.
Es difícil ser radical, pero vale la pena serlo
En principio, veo realmente peligrosa que esta posición venga de seguidores de un hombre como Cobos, quien apoyó y fue electo Vicepresidente, por el proyecto de los Kirchner del cual ahora está distanciado y es claro opositor.
Es bueno aclarar que los radicales recibimos con entusiasmo y los brazos abiertos a quienes luego de cometer el error de compartir un espacio con quien a la postre implementó un modelo autoritario, concentrador, poco republicano. Que dividió al país en numerosas partes, que perjudicó al conjunto de Provincias y que copta voluntades, borocotizando y por lo tanto desprestigiando la política, recapaciten y manifiesten su intención de retornar a la UCR.
Nos parece bien que regresen, pero no que pretendan erosionar a la institución de la UCR ni criticar y desgastar a sus autoridades, las que con aciertos y errores mantuvieron vivo un partido que otros abandonaban o que negociaban con el Kirchnerismo mientras se decían radicales.
Como viejo radical, parte de los que nos tocó ponernos la mochila del fracaso de la Alianza y cruzar el desierto mientras que otros se fueron del partido, valoro -y mucho- a las autoridades que lograron mantenerlo aún en condiciones muy adversas, de modo tal que hoy está instalado nuevamente, pese a que tuvimos que sufrir la dispersión de algunos tentados por del poder.
Vemos como llamativa esta extraña actitud de quienes, por un lado quieren dirigir los destinos de la UCR, y pretenden ser apoyados por toda la UCR en una postura personalista a favor de Cobos, pero todavía no se deciden si se mantienen con el partido CONSENSO FEDERAL, Partido al cual pertenece Julio Cobos – el CONFE- o si lo disuelven y se incorporan en la vieja y centenaria Unión Cívica Radical. Es como que algunos quieren estar con un pie en cada lado.
Una de las criticas que se le hace a Morales es que pretende que a la UCR la conduzca alguno de los dirigentes que permanecieron militando y jugándose por ella en sus peores momentos, ¿es acaso mucho pretender?, deberán considerar que los miles y miles de radicales que permanecieron militando activamente en el Partido tienen derecho porque se jugaron y lo mantuvieron vivo.
La política de los seguidores de encuestas es también peligrosa. Faltan 23 meses para las elecciones, hoy en día es cierto que Julio Cobos está bien instalado en las encuestas, pero recordemos que 20 meses antes de las elecciones del 28 de junio, las dos personas mejores instaladas eran Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner y así están hoy rechazados por mas de las dos terceras partes de la sociedad. Con ese criterio si mañana es Reuteman o Sola o Macri quien mida bien, ¿tendremos que encolumnarnos detrás de ellos?
Gracias a Dios, a diferencia de lo que piensan los personalistas de siempre, las ideologías no murieron, El radicalismo supero la muerte de sus lideres, no por acomodaticio u oportunista, sino porque a lo, largo de su historia, privilegió hacer lo que se debía hacer y no lo que circunstancialmente le convenía.
Es necesario tener vocación de poder y construir una fuerza política grande, pero no a cualquier costo, no todo vale en política, aliarse con cualquiera aun cuando existan diferencias ideológicas solo conduce al fracaso y al desgaste de la democracia y de los partidos políticos. La existencia de más de 700 partidos en la Argentina habla claro del fracaso de los personalismos y de los oportunistas, hoy existen partidos que si sus líderes se retiran, se jubilan o se mueren, desaparecen en corto tiempo.
“No sigan a hombres, sigan ideas, los hombres fallan, se equivocan o no pueden las ideas perduran en el tiempo”, esa frase del discurso de don RAUL ALFONSIN, marcó mi vida allá por el 83 y se la repito a los jóvenes cuantas veces puedo para que no se dejen tentar por los oportunismos ni los personalismos y para que no abandonen sus ideales radicales.
Personalmente entiendo que la aspiración de ganar las elecciones próximas, sólo se logrará en el escenario del Acuerdo Cívico y Social y dentro de los partidos que lo conformar están el Consenso Federal de Julio Cobos quienes tienen todo el derecho de proponerlo, está también el Partido Socialista que tienen todo el derecho de proponer a Hermes Binner, la Coalición Cívica que tienen todo el derecho de proponer a Elisa Carrió y también está fundamentalmente la UCR que tienen todo el derecho a proponer un candidato de los importantes dirigentes que tiene, o de apoyar alguna de las propuestas ofrecidas por los otros partidos integrantes del Acuerdo. Por lo que considero que será determinante en un tiempo breve resolver cual será el mecanismo de elección de los candidatos en el marco del Acuerdo Cívico y Social, para que luego todos juntos salgamos a trabajar a favor de quienes hayan sido democráticamente electos.
Para quienes impulsan la candidatura de Cobos, seria importante que pretendan ganarse el respaldo de los radicales que conservaron el partido y esto con seguridad que intentando desgastar a las autoridades de la UCR no lo van a conseguir.
No es demasiada exigencia de los radicales que conservamos el Partido, -cuando otros se fueron en la búsqueda de posiciones mas cómodas al amparo del poder- aspirar que sea un radical perseverante quien conduzca los destino de la UCR para acompañar al futuro Presidente de la Nación y saber aconsejarlo evitando así que en el futuro se repitan equivocaciones cometidas en el pasado reciente.
Como presidente del Comité Provincia de la Provincia de Jujuy me permito sugerirle al Sr. Vicepresidente de la Nación, Julio Cobos, que contenga la apasionada obsecuencia de algunos de sus seguidores que agrediendo a las autoridades de nuestro Partido Centenario, lejos de logar la voluntad de apoyo de los afiliados que se encuentran distribuidos por toda la geografía argentina, -lugares donde no llegan ni la radio, ni la televisión, ni los diarios escritos ni los digitales como Impulso Baires-, puedan ganarse el rechazo.
Es difícil ser radical, pero vale la pena serlo
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